Epidemiología

En la encuesta domiciliaria sobre consumo de drogas de 1997 (Observatorio Español sobre Drogas, informe nº 1, 1998), un 0.15% de los encuestados había consumido heroína en el último mes. Entre los heroinómanos es muy frecuente el uso concomitante de otras sustancias.

La mayor parte de intoxicaciones aguda por opiáceos se deben al consumo de heroína. Los heroinómanos acuden a urgencias por padecer un síndrome de abstinencia, una afección orgánica asociada, especialmente enfermedades infecciosas, o una sobredosis.

La sobredosis puede deberse a factores como una dosis masiva de la droga, cambios en la pureza-riqueza de la heroína (habitualmente entre el 15-30%), cambios en el lugar o condiciones habituales de autoadministración o la combinación con otros sedantes (alcohol, benzodiacepinas).

De un total de 1042 urgencias por drogas de abuso en los servicios de urgencias de 4 grandes hospitales de Barcelona, durante el primer trimestre de 1998, los opiáceos fueron responsables de 678 consultas (65%). La sobredosis de heroína es la causa de varios centenares de muertes anuales en nuestro país.

La heroína se consume por vía intravenosa, intranasal (esnifada) y fumada ("fumada en chinos", "chasing the dragon"). Las dos últimas van sustituyendo en frecuencia a la primera desde la aparición del SIDA. Aunque raramente, se han descrito cuadros de intoxicación en pacientes que utilizan dosis elevadas de los preparados orales de morfina y con el uso de parches percutáneos de fentanilo.