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6. Tratamiento de las intoxicaciones agudas
  Reanimación cardiorrespiratoria  
  Menor absorción del tóxico  
  Mayor eliminación del tóxico  
  Tratamiento antidótico  
  Tratamiento sintomático  
  Tratamiento psiquiátrico  

Mayor eliminación del tóxico

Sólo un reducido número de pacientes precisan de las técnicas para la incrementar la eliminación del tóxico. Deberán aplicarse a enfermos gravemente intoxicados y/o cuando no existan antídotos específicos. Su indicación y ejecución debe ser realizada por especialistas (nefrólogos o intensivistas), pues ninguna de ellas está exenta de complicaciones y requieren una cuidadosa monitorización.

Depuración renal:

Es aplicable en intoxicaciones por sustancias que se eliminen de forma inalterada por la orina y que estén parcialmente ionizadas en solución, es decir, que se comporten como ácidos o bases débiles. Las características que habrá de tener el tóxico son las siguiente: hidrosoluble, baja unión a proteínas plasmáticas, peso molecular inferior a 70.000, volumen de distribución inferior a 1 l/kg

Contraindicaciones:

Shock/hipotensión con oliguria, insuficiencia renal aguda o crónica, edema cerebral, edema pulmonar.

Efectos secundarios:

Sobrecarga de líquidos, edema pulmonar, edema cerebral, alteraciones electrolíticas (sodio, potasio, calcio o magnesio) y/o del equilibrio ácido-base.

Pautas e indicaciones:

- Diuresis alcalina: Consiste en alcalinizar la orina (pH entre 7,5 y 8). Pauta: 250 ml de bicarbonato sódico 1 M en perfusión i.v a pasar en 6 h. mas 500 ml de s. glucosado al 5% (con 40 mEq de ClK) a pasar en 6 horas. Repetir el ciclo si es necesario o añadir bolos de 20 mEq de Bicarbonato 1 M si el pH urinario es menor de 7.5. Suspender si existe alcalosis metabólica severa y vigilar el potasio. Se aconseja su empleo en la intoxicación por salicilatos.

- Diuresis forzada alcalina: Consiste en alcalinizar la orina e incrementar la producción de ésta mediante el aporte de líquidos y diuréticos. Pauta: 100 ml de bicarbonato sódico 1 M en perfusión i.v a pasar en 3 h. mas (conectado en “y”) 500 ml de s. glucosado al 5% (con 10 mEq de ClK) en la 1ª hora, 500 ml de s. salino al 0.9% (con 10 mEq de ClK) en la 2ª hora, 500 ml de manitol al 10% (con 10 mEq de ClK) durante la 3ª hora. Repetir el ciclo las veces que sea necesario o añadir bolos de 20 mEq de Bicarbonato 1 M si el pH urinario es menor de 7,5. Suspender si existe alcalosis metabólica severa y vigilar el potasio. Se aconseja su empleo en la intoxicación por metotrexato, herbicidas clorofenólicos (2,4D; 2,4,5-T, MCPP, MCPA), barbital y fenobarbital.

- Diuresis forzada neutra: Consiste en incrementar la producción de esta mediante el aporte de líquidos y diuréticos. Pauta: 500 ml de s. salino al 0.9% (con 10 mEq de ClK) en la 1ª hora, 500 ml de s. glucosado al 5% (con 10 mEq de ClK) en la 2ª hora, 500 ml de s. salino al 0.9% (con 10 mEq de ClK) en la 3ª hora, 500 ml de manitol al 10% durante la 4ª hora. Repetir el ciclo las veces que sea necesario y vigilar el potasio. Se puede utilizar en la intoxicación aguda por litio, bromo, talio y con cierta controversia en las intoxicaciones por paraquat y amanitinas.

- Diuresis forzada ácida: La diuresis ácida forzada ya no se utiliza. Se recomendó en la intoxicación aguda por fenciclidina y en algunos casos por anfetamina y fenfluramina; sin embargo, en todos ellos el tratamiento con sedantes es suficiente y el riesgo a inducir una insuficiencia renal es elevado.

Depuración extrarrenal:

- Diálisis peritoneal: No tiene ninguna indicación en toxicología aguda.

- Hemodialisis: Las principales indicaciones son intoxicaciones graves o muy graves por metanol, etilenglicol, salicilatos, litio, fenobarbital, bromo, talio, isopropanol, procainamida.

- Hemoperfusión: Es eficaz para eliminar barbitúricos de acción corta y media, meprobamato, teofilina, quinidina, carbamazepina y metotrexato. Su uso se reserva para intoxicaciones muy graves

- Hemofiltración, hemodiafiltración y hemodialisis continua: El papel de estas técnicas en el manejo de determinadas intoxicaciones es todavía limitado. Hay buenos resultados en el caso del litio (hemodiafiltración y hemofiltración), procainamida (hemodiafiltración o hemofiltración) y metrotexato.

- Plasmaféresis y exanguinotransfusión: El empleo de estas técnicas suele ser excepcional, sin embargo la primera de ellas se ha utilizado en intoxicaciones por tiroxina y digitoxina y la segunda en casos extremos de exposición a sustancias metahemoglobinizantes.